La alimentación de las personas adultas mayores debe ser Equilibrada, que quiere decir esto, que este acorde a las necesidades de energía, proteínas, grasas, vitaminas y minerales que su edad requiere, ya que la nutrición en ellos debe tener ciertas consideraciones adaptadas a esta etapa.
El objetivo de una adecuada alimentación en la persona adulto mayor, es mantener un óptimo estado de salud, que permita cubrir las necesidades nutricionales para evitar deficiencias, mantener el adecuado peso corporal, retardar la ocurrencia o progresión de enfermedades relacionadas con nutrición y evitar la ingesta excesiva de algunos nutrientes.
Los cambios nutricionales en esta etapa tardía de la vida no sólo se adaptan a las menores necesidades energéticas, sino que deberían tener en cuenta las dificultades de masticación. Es importante, tener presente que la aportación proteica a esta edad es la misma que la que requieren los jóvenes, y para un buen aprovechamiento es mejor que al menos la mitad sea de alto valor biológico (de origen animal).
La leche y los lácteos, por su contenido de nutrimentos como calcio, fósforo, magnesio, vitaminas A y D, proteínas y otros nutrientes esenciales para el mantenimiento de la salud del adulto mayor, ayudan a evitar la pérdida de músculo o sarcopenia, la osteorporosis y el deterioro del sistema inmunológico.
De los aminoácidos indispensables que contiene la Leche, la leucina es la que predomina. Los lácteos, al igual que otros productos de origen animal, proporcionan cantidades importantes de proteínas por lo que son considerados como fuente de proteínas de alta calidad, además de ser accesibles en costo, versátiles en su forma de consumo y por lo general, de fácil asimilación.
En el caso de que el adulto mayor no pudiera consumir leche por presentar síntomas de intolerancia a la lactosa, se recomienda sugerir el consumo de Leche Deslactosada Doña Leche, ya que hay que recordar que en su matriz se encuentra el magnesio y el fósforo que apoyarán a que el calcio sea mejor aprovechado.
De igual manera, se recomienda que los adultos mayores consuman a diario de dos a tres porciones de alimentos bajos en grasa, tales como Leche Semidescremada Doña Leche, yogurt semidescremado (Yogurt Natural) o descremado (Yogurt Slim 0%) y quesos bajos en grasa, como el queso Pera Doña Leche. Esto ayudará a reforzar su buena nutrición.
Es importante recordar, con la edad la sensación de sed disminuye. El agua es esencial para el buen funcionamiento de los riñones, evita la deshidratación, mantiene la temperatura corporal normal y ayuda a la digestión. Por tal razón, deben TOMAR 6 a 8 VASOS DE AGUA AL DÍA, aunque no Tengan Sed
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Fuentes de Consulta: